Ya en documentos del siglo XIII hay referencias a los caminos que comunicaban Castilla con los puertos vizcaínos, desde donde luego se exportaban las producciones a otros países. Esta vía en concreto entraba en Bizkaia por Urkiola y luego se dividía en tres direcciones: Lekeitio, Ondarroa y Bermeo. El ramal hacia esta última villa marinera era el que se utilizaba para comercializar el vino y el pescado.
El acceso a la colegiata de Zenarruza desde Bolibar (cuna de los antepasados de Simón Bolibar, Caudillo de las independencias americanas y Libertador de Venezuela) se realiza a través de una calzada reconstruida en el siglo XIX. Es un enclave de gran valor histórico-artístico en el que pueden visitarse la iglesia gótica, y las capillas y el claustro de estilo renacentista que es posterior, con su precioso retablo de estilo plateresco.
Según la leyenda, esta colegiata se construyó en el lugar donde un águila dejó caer una calavera. A la entrada de la colegiata, un grabado en piedra nos recuerda este mito.
La colegiata es conocida también por haberse documentado en ella la existencia de un hospital de peregrinos, que iban camino de Gernika siguiendo el trazado del Camino de Santiago (ramal del Norte o “Camino de la Costa”) por Bizkaia.