ETAPA 5: MARKINA-XEMEIN • GERNIKA-LUMO

Una arquitectura defensiva

Durante la Edad Media en el País Vasco se construyeron diferentes tipos de construcciones militares. Encontramos las fortalezas situadas en cimas rocosas, iglesias fortificadas y las villas amuralladas, por ejemplo, que constituyen ejemplos de cómo los reyes, los señores o las villas y sus concejos defienden sus territorios y sus recursos. No obstante, a medida en que las familias nobiliarias pretenden mostrar su posición social y su dedicación a la guerra y, si la situación los requiere, defender a sus deudos en contra los ataques de otros ejércitos.

A partir del siglo XIV, los enfrentamientos entre los señores de la guerra, los Parientes Mayores, se agudizarán y esto traerá consigo una creciente inseguridad, un mayor peligro sobre las personas y sus bienes y también una multiplicación de los encuentros armados. Los linajes más poderosos concentraron en su entorno a otras familias menores, así como a toda una suerte de malhechores, mercenarios y cualquier individuo que pudiera defenderles o que careciera de escrúpulo para el robo y el saqueo.

En este contexto se desarrollaron las fortalezas privadas. Estas familias conviertieron sus hogares en casas fortificadas, que suelen conocerse por el nombre de casas-torre y se delatan por su apariencia cerrada y recia. Contaban con escasas ventanas y, al menos en las plantas más bajas, solían ser estrechas y alargadas, suficientes para dejar entrar la luz y poder disparar flechas o dardos de ballesta en caso de necesidad defensiva.

Una torre de los Arteaga en Mendata

La llamado torre de Montalbán se sitúa en un cerro de importancia estratégica (de 205m de altura), ya que se sitúa de forma aislada en torno a los barrios y poblaciones del entorno. Domina el barrio de Zarrabenta desde el norte y defiende el acceso desde Arratzu en dirección hacia Munitibar. Esta torre perteneció al linaje de Arteaga, uno de los más destacados de Bizkaia, perteneciente al bando gamboíno. Su construcción actual parece retrotraerse a fines del siglo XV o inicios del XVI.

Aunque actualmente presenta varias construcciones posteriores que se le añaden desde el exterior, su núcleo original consiste en una torre pentagonal, de mampostería con cadenas esquineras de sillería arenisca. Su fachada principal presenta una altura de 10m y presenta una puerta elevada, a la que se accedía por medio de un patín de madera, hoy desaparecido, seguramente desmontable. A excepción de una ventana, el resto de vanos no son más que aspilleras o saeteras, que confieren al edificio su apariencia maciza. El grosor de las paredes exteriores es de 2m, lo que muestra claramente la intencionalidad militar de este edificio.

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