Departamento de Cultura y Política Lingüística

95. Molino de Errotaberri (Larrabetzu)

ETAPA 6: GERNIKA-LUMO • BILBAO

El método tradicional de obtención de harina

En época medieval, los molinos que aprovechaban la fuerza del agua podían ser de dos tipos diferentes, en función de la disposición de sus elementos motrices: aceñas o molinos. En los primeros, el eje que gira la piedra muele el grano se dispone en horizontal, de forma que o bien el agua es vertida a las aspas de la rueda desde una canalización ubicada a una altura superior o bien ésta se halla parcialmente inmersa en el canal por donde discurre el fluido, que la mueve a su paso.

Si bien tenemos constancia de que este tipo de artilugios existieron en el País Vasco, los molinos mayoritarios fueron aquellos en los que el eje era vertical, algunos aún en marcha. El agua es captada a través de un obstáculo en el río (una presa o azud), que desvía parte del agua por un canal paralelo al cauce. Éste desemboca en un depósito. Cuando el molinero acciona el sistema, el agua se introduce por un conducto estrecho (lo que aporta mayor fuerza y velocidad al fluido) hacia la sala de máquinas, situada a una cota inferior. Un sifón dirige el chorro hacia las molduras del rodete, que gira por impulso del agua. El eje vertical transmite la rotación al piso superior, la sala de molienda.

Las piedras de moler se disponen por pares de forma que una, la durmiente, no gira y la superior, la volandera, es la que rota. Sobre el eje de esta última se ubica una tolva, a la cual se vierte el grano, que se va vaciando progresivamente por gravedad, permitiendo dosificar la cantidad que cae entre las muelas. La forma de las piedras también favorecía que la harina resultante fuera precipitándose por su propio peso a un recipiente situado al pie de las piedras de moler.

El agua sobrante salía por la estolda o desague, que normalmente consiste en un gran arco que también permitía el acceso de los operarios en caso de avería o de tener que realizar algún ajuste.

El molino de Errotabarri

Se trata de un pequeño molino construido a mediados del siglo XVIII y que actualmente se encuentra adosado a un caserío. La regata que circula por el pequeño cauce fue suficiente para mover el ingenio hidráulico que accionaba la molienda. Actualmente podemos obsevar el arco de medio punto por la que desagua la corriente, realizado en sillería arenisca, al igual que las cadenas esquineras y la ventana que permitía la iluminación interior del molino.

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