Departamento de Cultura y Política Lingüística

185. Manufacturas Olaran (Beasain)

ETAPA 3: TOLOSA • ZEGAMA

Último testimonio del sector industrial de curtiduría de Gipuzkoa

La provincia de Gipuzkoa contó con un sector industrial del curtido que tuvo una cierta concentración en el Alto Deba, en localidades tales como Antzuola y Oñati, aunque hubo otros ejemplos destacados en otros municipios como Hernani o Beasain. Desaparecidos los grandes centros curtidores históricos del territorio, Manufacturas Olaran S.A. constituye uno de los últimos vestigios de este sector industrial en Gipuzkoa.

Fue en el año 1881 cuando Fernando Olaran fundó una fábrica de curtiduría en Antzuola, municipio que se erigió como uno de los grandes centros de curtidores en la provincia que llegó a contar con cuatro instalaciones de este tipo. No obstante, en la década de los 30 del siglo XX, la fábrica se trasladó al municipio de Beasain, asentándose en el lugar que hoy ocupa el edificio donde se alojó. El traslado se realizó a un inmueble que antaño había acogido una fábrica de muebles de madera, junco y mimbre, cuya ubicación resultaba excelente dado que se encontraba junto a la carretera que en aquella época llevaba de Madrid a Irún.

Hubo que adecuar el edificio a las necesidades de la curtidería, trabajos de rehabilitación que corrieron a cargo del arquitecto Florencio Mocoroa Gastesi. El arquitecto tolosarra nació en 1903 y está considerado como uno de los padres del racionalismo arquitectónico de la provincia guipuzcoana. Cuenta con destacadas obras en el barrio donostiarra de Gros, como son la Casa de los solteros y la gasolinera (ambos de los años 30). El proyecto presentado por Florecio Mocoroa para la rehabilitación del edificio de Beasain se aprobó en el año 1939, que introducía cuantiosos cambios en el edificio y mostraba el interés del arquitecto por incluir elementos de modernidad en el inmueble industrial. Los cambios más destacados resultaron ser la construcción de una torre, la elevación de un piso y la introducción de elementos como un reloj o el rótulo de la razón social de la fábrica. Posteriormente, en la década de los 50 el edificio contó con nuevas remodelaciones de menor impacto, como la construcción de una vivienda o los garajes.

Aunque en sus inicios la dedicación de Manufacturas Olaran se centró en los curtidos, a lo largo de las décadas fue evolucionando, innovando y modificando sus especialidades. De este modo en los años 30 comenzó a producir planchas de caucho para calzado, en los 70 se especializó en la fabricación de curtidos de cuero vacuno para la industria de muebles, marroquinería y calzado, y en los últimos años trabajó en la hidrofugación del cuero destinado a tapicería. Continuó en funcionamiento trabajando para el mercado estatal y europeo hasta el cierre definitivo el año 2009.

El edificio de la fábrica

El edificio de Manufacturas Olaran se asienta en la carretera que de Beasain llega a Ordizia. De una modernidad sorprendente, el inmueble presenta un estilo arquitectónico racionalista que lo hace reseñable a nivel provincial. De planta rectangular, con una estructura de hormigón armado, el edificio posee tres alturas y una cubierta aterrazada. Destaca su torre cuadrangular en la que se abren ventanas en sección vertical.

En su exterior la fachada es dinámica, ya que juega con los contrastes y contraposiciones entre las dos vertientes del edificio. De esta forma, mientras que en su lado sur la fachada se retranquea y es cruzada en diagonal por una escalera exterior, en su lado norte el edificio muestra un aspecto más austero, compacto y cerrado, caracterizado por la apertura de pequeños vanos rectangulares en las dos plantas inferiores, sobre las cuales se disponen las letras que presentan el nombre de la fábrica, Manufacturas Olaran, con caracteres modernos racionalistas.

En su interior el edificio es funcional, es decir que se ajusta a las necesidades productivas de la fábrica, en la que se caracteriza por presentar grandes espacios diáfanos sin apenas compartimentación, con pilares de hormigón.

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