ETAPA 2: HERNANI • TOLOSA

De la aldea altomedieval a la villa

Amasa, actual barrio del municipio de Villabona, se sitúa en la orilla derecha del río Oria, en una zona elevada ocupando la ladera del monte Urdelar, a 1 Km de distancia sobre el núcleo principal del municipio. No obstante, el núcleo de Amasa cuenta con una gran antigüedad, ya que posiblemente se trata de una aldea de origen altomedieval.

En los siglos centrales de la Edad Media (hacia el año 1000-1100), Amasa sería una entidad con personalidad política propia, como otras aldeas del entorno. Sin embargo, en la Baja Edad Media mantenía una estrecha relación con el núcleo de Villabona, al compartir además de los límites territoriales, la propiedad y el disfrute de los montes concejiles, la ferrería de Larbarrain, los molinos de Arroa y Orokaiztegi, y la iglesia parroquial de San Martín de Amasa (los vecinos de Villabona tenían que subir a Amasa para recibir los servicios religiosos). A pesar de este nexo, en el año 1385 Amasa se unió a la vecindad de la villa de Tolosa, manteniendo sus términos amojonados y su administración económica. Ante las aspiraciones de Villabona de constituir una villa de pleno derecho se originó una situación que trajo consigo numerosos conflictos. La orden dada por la Corona en el año 1480, por la cual mandaba a sus representantes en la Provincia que guardaran los derechos de Villabona de tener concejo y cargos concejiles, muestra que para entonces ésta ya contaba con una organización de villa. Sin embargo, tuvo que pugnar con la potente localidad de Tolosa hasta bien entrado el siglo XVI por causas jurisdiccionales, ya que los alcaldes de ambas localidades reclamaban para sí la jurisdicción y los usos y aprovechamientos de los terrenos que Amasa y Villabona continuaban compartiendo.

En 1614 Amasa obtuvo la solicitada desanexión de Tolosa y el privilegio para constituirse en villa. Unos años más tarde, en 1619, las villas de Amasa y Villabona firmaron una escritura de concordia por la cual acordaban que ambas tendrían para su gobierno municipal un solo ayuntamiento que sería común. Así se dieron por finalizados años de constantes enfrentamientos que suscitaron enemistades y conflictos entre municipios.

El conjunto rural de Amasa

Amasa se trata de un núcleo que históricamente ha estado muy vinculado a la actividad agropecuaria y a la explotación del bosque, además de la explotación del hierro a través de la ferrería existente en su término. De carácter rural, está conformado por varios núcleos de caseríos comunicados entre sí por medio de caminos vecinales. Entre estos caseríos destaca el de Andretegi, ubicado junto a la iglesia parroquial. Se trata de un caserío de grandes dimensiones que presenta elementos de estilo gótico. Sin duda su fachada principal es la más llamativa y la que conserva interesantes elementos en los que reparar. Construido con fábrica de mampostería, presenta sillería en las cadenas esquineras y marcos de las ventanas y puertas. De tres alturas, consta de una puerta de acceso con arco ojival dovelado, un pequeño vano de arco de medio punto y una ventana con arco conopial en su planta baja. En las alturas superiores se abren ventanas adinteladas, siendo de un tamaño pequeño las ubicadas en el piso superior. El edificio está enlucido en blanco por completo y posee una cubierta a dos aguas.

Uno de los elementos más subrayables del conjunto rural de Amasa por el mito que lo rodea es la ermita de Santa Cruz. La leyenda afirma que esta ermita fue el primer templo cristiano de Gipuzkoa y que su construcción se realizó sobre los restos de un anterior templo de la tardo-antigüedad, entre los siglo VII y VIII. No obstante no hay evidencias arqueológicas que atestigüen tales afirmaciones, por lo que a día de hoy no deja de ser un mito una tradición oral. La primera mención documental sobre el edificio es del siglo XVI y el edificio actual de la ermita se enmarca en esa cronología. Su acceso es a través de un amplio pórtico sustentado por cinco pilastras y una cruz de madera de grandes dimensiones.

En el centro del núcleo se erige majestuosa la iglesia parroquial de San Martín de Tours de Amasa. Su construcción actual pertenece a los trabajos llevados a cabo en los siglos XVI y XVII. En su exterior presenta un aspecto de fortaleza con muros de fábrica de sillar y escasa apertura de vanos. Tiene adosada una torre octogonal que alberga el campanario y en la que se abren pequeñas ventanas, y cuenta con un ábside ochavado en la que se abren dos ventanas de tracería gótica. El templo presenta planta de salón y bóvedas de crucería, destacando su retablo mayor barroco, obra de José Ignacio de Lavi (1767).

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