197. Conjunto del núcle historico de Araia (Araia, Asparrena)
ETAPA 4: ZEGAMA • SALVATIERRA-AGURAIN
Araia, puerta de entrada a la Llanada Alavesa
Situada a una altitud de 605 metros, al pie de las peñas de Aratz, Albéniz, Egilar y los montes de Altzania, es la capital del término municipal de Asparrena. Desde el puerto de San Adrian desciende un importante camino que pasando por Araia se adentra en la Llanada Alavesa. Su ubicación junto al camino, que vivió su época de mayor auge en la Edad Media, permitió a Araia formar parte del entramado de una importante ruta comercial y de peregrinación.
La presencia humana en el entorno es temprana, como dejan ver los abundantes monumentos megalíticos existentes en la zona que nos indican que ya en la prehistoria el lugar acogía grupos humanos que desarrollaban aquí sus distintas actividades cotidianas. En época posterior Araia tuvo importancia como punto estratégico al borde distintas vías de comunicación, como fueron la calzada romana que unía Astorga con Burdeos en época romana y la ya mencionada ruta que provenía de San Adrián ya desde la Edad Media. Una de las evidencias que delatan la importancia de este segundo camino son las ruinas del castillo de Marutegi, construido por el rey de Pamplona en torno al siglo XII, situadas sobre un elevado peñón que lo controlaba y protegía.
Históricamente la explotación de molinos y ferrerías, así como la de canteras y la industria maderera han sido muy importantes en la economía de la zona. La existencia en el término de minas de hierro, junto con el agua y un abundante arbolado, propició que se establecieran varias industrias siderúrgicas que tuvieron su auge principalmente en el siglo XIX, y que fueron una de las más conocidas de la provincia. Una de ellas es la fábrica de hierros de la familia Ajuria, familia que constituyó uno de los ejes del desarrollo de Araia al ofrecer empleo durante años a una gran parte de los vecinos de la localidad.
Conjunto patrimonial de Araia
En el centro se encuentra la iglesia de San Pedro, cuyo edificio actual fue construido entre los siglos XV y XVI. De planta rectangular y cabecera poligonal presenta una única nave que consta de tres tramos, dos de las cuales están cubiertas por bóvedas nervadas, y la tercera con bóveda de terceletes. En el interior conserva un retablo de 1790, de estilo neoclásico, y un reseñable coro que destaca por su doble piso arquitrabado. En el exterior la portada principal presenta un arco conopial moldurado, enmarcado con un alfiz que se sujeta sobre las repisas. La torre, situada a los pies del edificio, fue construida en el siglo XVIII, en el año 1740. La iglesia cuenta en los muros del ábside con elementos reutilizados de época romana como son los restos de lápidas.
Araia presenta un conjunto de reseñables elementos de arquitectura civil entre la que destaca la Casa Consistorial situada junto a la iglesia de San Pedro. El edificio data del año 1771, y constituye un magnífico ejemplo de esta arquitectura durante el barroco. En su fachada luce el escudo de la Hermandad de Asparrena, de grandes proporciones y adornos de estilo rococó. Presenta una leyenda que indica que el edificio era la “Casa de los Caballeros Hijosdalgo de la Noble Hermandad de Asparrena”. En el interior del edificio se conserva el “arca negra”, mueble que servía para guardar los documentos más importantes de la Hermandad. Está fabricada en hierro forjado con remaches de hierro pudelado y posee un sistema de cierres complejo para evitar posibles robos.
Por otra parte hallamos el palacio de los Ajuria, residencia de la familia del mismo nombre y ya mencionada, que fue construida en el siglo XIX y que presenta un estilo historicista. Son de resaltar también el caserón Herriko Enparantza, situado en la plaza del ayuntamiento, también del siglo XIX y que presenta un estilo neoclásico o el kiosko de la plaza del ayuntamiento del año 1918.
En el centro y muy cerca de la iglesia se sitúa el frontón de Iturbero, un ejemplo de arquitectura civil dirigida al ocio, que fue construido en 1876, siendo uno de los más antiguos de la provincia de Álava. Fue restaurado en el año 1983 y por tantó sufrió alguna modificación. En la actualidad el frontón posee una longitud de 25,40, presenta un frontis de sillería y un suelo de hormigón pulido. El frontón está delimitado en su lado izquierdo por una pared de mampostería pintada en verde, que forma parte del juego de la pelota, y por un edificio de estilo neoclásico en su lado derecho que tiene tres plantas y un espacio porticado con siete arcos en su parte baja.