El Gobierno Vasco devuelve al funcionariado las "35 horas semanales" retiradas por ley básica del Gobierno español en 2012
2 de febrero de 2016
- Una comisión interdepartamental vasca elaborará la Estrategia de Empleo 2020, que se espera tener terminada para finales de mayo
- Euskadi cuenta con casi 900 desfibriladores al cumplirse un año de la entrada en vigor del decreto del Gobierno Vasco que establece la obligatoriedad en espacios públicos concurridos
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy el “Decreto por el que se establece la jornada de trabajo anual para el año 2016 para el personal funcionario, estatutario y laboral de la Administración Pública de la Comunidad Autónoma de Euskadi”, que fija la jornada laboral en 1.592 horas al año, 22 horas y media de presencia efectiva menos que en 2015. De esta forma, el Gobierno Vasco cumple su compromiso de devolver al personal público las “35 horas semanales”, pactadas con las sindicatos en el año 2000, y anuladas por el Gobierno español en 2012.
Así lo ha anunciado hoy el portavoz del Gobierno Vasco y consejero de Administración Pública y Justicia, Josu Erkoreka, en la rueda de prensa posterior al Consejo. El Gobierno Vasco adopta esta decisión tres años y medio después de esta normativa básica dictada por el Gobierno español, cuando la situación económico-prespuestaria lo ha permitido. Tiene efectos de entrada en vigor desde el 1 de enero de este año.
Asimismo, el Departamento de Empleo y Políticas Sociales ha informado hoy al Consejo de Gobierno del inicio de un proceso de trabajo para elaborar la Estrategia Vasca de Empleo 2020, que se espera tener culminada para finales del mes de mayo. En esta estrategia trabajará una Comisión Interdepartamental coordinada por Lehendakaritza y participada por las áreas del Gobierno con relación más directa en el diseño de esta Estrategia, en la que tomarán parte las personas titulares de las Viceconsejerías de Tecnología, Innovación y Competitividad; Industria; Empleo y Trabajo; Economía y Presupuestos y Formación Profesional, así como de la Dirección General de Lanbide.
Para el Gobierno, el empleo continúa siendo una de las cuestiones que más preocupa a la ciudadanía por su generalizado impacto social, constituyendo en consecuencia una prioridad política de primer orden. En este sentido, el consejero de Empleo, Ángel Toña, ha valorado los datos de paro y afiliaciones de la Seguridad Social conocidos hoy, y que han sido publicados por el Ministerio de Empleo y Seguridad. Toña ha recordado que nos encontramos en niveles de afiliación similares a los periodos precrisis, aunque ha reconocido que para 2016 se mantienen las incógnitas sobre la creación de empleo, por lo que insta a permanecer en “alerta".
900 DESFRIBRILADORES
Además, el consejero de Salud, Jon Darpón, ha hecho balance en esta misma rueda de prensa del Decreto del Gobierno Vasco, por el que se regula la instalación y uso de desfibriladores externos automáticos y semiautomáticos y que establece la obligatoriedad de su instalación en determinados espacios de uso público.
Cuando van a cumplirse 12 meses desde su entrada en vigor, el 5 de febrero de 2015, tras su aprobación por el Gobierno Vasco a propuesta del Departamento de Salud, el número de desfibriladores en Euskadi suman casi los 900, (897). Así, Darpón se ha mostrado satisfecho con los resultados de la aplicación de este Decreto porque se han cumplido los objetivos de disponibilidad y concienciación y, en la actualidad, Euskadi cuenta con un número muy elevado de desfibriladores automáticos que pueden ser utilizados por personal ajeno a la profesión sanitaria, lo que ayudará a aumentar las expectativas de supervivencia de una persona ante una parada cardiorrespiratoria mientras llegan los servicios de emergencia, ha destacado.
NECESARIA ESTABILIDAD EN MADRID
En otro orden de cosas, y a preguntas de los periodistas sobre los pactos de gobernabilidad en Madrid, el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha reclamado la necesidad de contar en el Ejecutivo español con un interlocutor estable lo antes posible dado que la inestabilidad “está afectando a la toma de decisiones del Gobierno Vasco”, como es el caso de la crisis del sector del acero. Por ello ha instado a las formaciones políticas con responsabilidad en la formación del Gobierno español a dejarse de “tacticismos”.
