El pasado 8 de marzo se presentó ESAS, una red de artistas y creadoras surgida  de la idea de poner en marcha una orquesta de mujeres. Las impulsoras de la iniciativa, Ane Legarreta, Natalia Sánchez y Nekane Díaz, convirtieron en oportunidades las dificultades encontradas en el camino, y crearon una plataforma permanente. Desde allí trabajan para visibilizar los trabajos de las mujeres de la música clásica, ofrecer referentes a las nuevas generaciones y crear sinergias entre creadoras de todas las disciplinas artísticas, con el objetivo de romper definitivamente los desequilibrios de género en el ámbito cultural. Hemos repasado con su ayuda los objetivos y la trayectoria de la red.

¿Qué es ESAS?

ESAS (Emakume Sortzaile eta Artisten Sarea) es la Red de Mujeres Creadoras y Artistas. El objetivo de la asociación es dar a conocer a las músicas profesionales, siempre desde la excelencia musical, y para ello creamos eventos en diferentes formatos para aumentar alianzas con otras especialidades culturales.


¿Cómo surgió la idea de poner en marcha esta red?

Atendiendo a los diálogos entre mujeres de diferentes especialidades de música clásica. Somos muchas las que buscamos referentes femeninos en los escenarios (y detrás de ellos) y la mayoría de las veces tenemos dificultades para encontrarlos.

En un primer momento queríamos crear una orquesta femenina para un evento muy concreto. Pero, ¿cómo formar una orquesta de mujeres si hoy en día hay muchas especialidades casi exclusivamente masculinas? Para que esta idea se convirtiera en realidad teníamos que dar muchos pasos y nos dimos cuenta de que el camino no era hacer un evento, sino crear un proyecto de visibilidad y que perviviera en el tiempo.


La presentación pública fue el 8 de marzo. ¿Cómo valoráis la respuesta que ha tenido la iniciativa en este tiempo?

Los primeros momentos fueron muy especiales. La gente y los medios de comunicación se interesaron mucho por nuestro proyecto y tuvimos una buena acogida.

Pero no ha sido el momento más fácil para poder llevar a cabo nuestras acciones, porque el ámbito de la cultura ha estado especialmente condicionado por las restricciones de aforo. Sin embargo, han sido muchas las músicas que se han puesto en contacto con nosotras y también mujeres de otras especialidades artísticas.

La decisión que hemos tomado ha sido la de empezar a desarrollar acciones de menor formato, hasta que a medio plazo tengamos la capacidad de cumplir nuestro principal objetivo: formar una orquesta sinfónica compuesta por mujeres.

¿Qué iniciativas habéis podido desarrollar la presentación?

Entre las iniciativas desarrolladas destaca la participación en el espacio Sormene organizado por el Ayuntamiento de Galdakao. En el concierto que organizamos hicimos estrenos de obras de compositoras femeninas, todas las músicas que participaron en el escenario eran mujeres y también las que trabajaron en el audiovisual, porque ese es el objetivo de la red ESAS: desarrollar acciones interdisciplinares con la música clásica como núcleo.

Además, este año participamos en la convocatoria anual de Gira Mujeres que organiza Coca–Cola, y quedamos finalistas entre 502 proyectos.

Entre los proyectos que tenemos entre manos, la próxima temporada ofreceremos tres conciertos en la sala Muxikebarri de Getxo. Todas las participantes serán mujeres, tanto en la organización como sobre el escenario.


Como comentáis, vuestro objetivo es visibilizar el trabajo de mujeres creadoras de todos los sectores artísticos, haciendo especial hincapié en la música clásica. ¿Cuál es exactamente la situación que se vive en esta disciplina?

El análisis de los datos concretos nos lleva a la conclusión de que la participación de mujeres y hombres en las programaciones de las orquestas sinfónicas sigue siendo muy desigual en especialidades concretas, principalmente entre compositores y directores.

Además de esto, las mujeres representan una minoría porcentual de la plantilla de las orquestas y otros grupos sinfónicos, muy por debajo de la mitad en la mayoría de los casos.

Más allá, al analizar las familias de los instrumentos, es evidente la brecha existente en algunas especialidades, especialmente en los metales de viento y en la percusión.


¿Qué pasos hay que dar para equilibrar esta situación?

Visibilizar referentes femeninos en las especialidades mencionadas y demostrar a las generaciones más jóvenes que no existen instrumentos ni especialidades sexualizadas.

Es terrible que todavía hoy algunas personas piensen que por ser mujer vas a ser peor en el trabajo, pero por desgracia es un pensamiento que todavía está vivo.

¿Cuáles creéis que son los principales retos a abordar en un futuro próximo para conseguir la igualdad de oportunidades para todas las personas en el ámbito artístico?

Desde la red ESAS tenemos algunas propuestas: trabajar dejando de lado los prejuicios, fomentar el trabajo en equipo y la hermandad emprendedora u ofrecer acciones de calidad, entre otras. Porque esta es nuestra filosofía, porque creer en las propias capacidades es el punto de partida para triunfar.

(Especial publicado el 27 de diciembre de 2021).